Monday, September 10, 2012

En Cristo Jesús siempre hay un si

Por el Rev. José Eugenio Hoyos

Cuando un padre o una mamá  ven que sus hijos se están comportando bien, sacando buenas notas en la escuela o en el colegio, colaborando positivamente en el hogar, alejados de los vicios o las malas compañías y que son hijos dóciles al mandato de sus padre, entonces siempre en los labios de esos padres agradecidos abra un si para sus hijos, cuando ellos piden un favor, un permiso, un paseo o dinero.

Igualmente nuestro Padre en común tienen un “si compasivo”, con los hijo(a) que se portan bien, que son asiduos en la oración, cuando confiesan sus pecados y sobretodo cuando llevan una vida según los mandamientos. En Mateo 21, 28-32 encontramos un claro ejemplo del amor de Dios y de la obediencia hacia el padre. Jesús agregó: “¿Qué les parece esto? Un hombre tenía dos hijos. Se dirigió al primero y le dijo: ‘Hijo, hoy tienes que ir a trabajar a mi viña’. Y el respondió: ‘no quiero’. Pero después se arrepintió y fue. Luego el padre se acercó al otro y le mando lo mismo. Este respondió: ‘voy, señor’. Pero no fue. Jesús, pues, pregunto: ‘¿Cuál de los dos hizo lo que quería el padre?’ ellos contestaron: ‘el primero’. Y Jesús prosiguió; ‘en verdad, los publicanos y las prostitutas les preceden a ustedes en el Reino de los cielos. Porque juan vino para indicarles el camino del bien y ustedes no le creyeron, mientras que los publicanos y las prostitutas le creyeron; ustedes fueron testigos, pero ni con esto se arrepintieron y le creyeron’”.

En Cristo Jesús no hubo más que un si. En El, todas las promesas de Dios han llegado a ser un si. Maria dijo si, los apóstoles dijeron si, los profetas anunciaron que si, y ahora pregúntate cual es la respuesta que le tienes a Cristo cuando te llama a evangelizar y anunciar el Reino de Dios en este “Año Internacional de la Fe?”

Friday, September 7, 2012

Da pena que tu vida la vivas con tanta pena

Por el Rev. José Eugenio Hoyos
 
No digas nunca que tienes mucha suerte, mas bien te aconsejo a que digas: “En mi vida tengo muchas bendiciones!”

Da pena en verdad que tu vida la vivas con tanta pena. Es inconcebible que siendo tu vida un hoy quieras convertirla en un ayer o en un mañana.

No se entiende que siendo un regalo por abrir te sientas como un pedazo de basura.

Ojala recuerdes estos consejos para que dejes tus penas a un lado y vivas a plenitud, feliz, tranquilo(a) y lleno(a) de paz:
Hoy me enfrentaré a mi vida con la convicción de que este día jamás volverá.

Hoy es la última oportunidad que tengo de vivir intensamente, pues nadie me asegura que mañana volveré a amanecer.

Hoy tendré la audacia de no dejar pasar ninguna oportunidad, mi única alternativa es la de triunfar.
Hoy invertiré mi recurso mas importante: mi tiempo, en la obra mas trascendental: mi vida; cada minuto lo realizare apasionadamente para hacer hoy un día diferente y único en mi vida pues quiere estar Bendecido(a), Encendido(a), Sanado(a) y en Victoria!