Friday, January 29, 2016

Jesús Quiere Sanarte y Punto


Por José Eugenio Hoyos


“Sus caminos vi. Yo le curare y le guiare, y le daré ánimos a él y a los que con el lloraban, poniendo alabanza en los labios: ¡Paz, Paz al de lejos y al de cerca! Dice Yavé. Yo lo sanare.” (Isaías 57, 18-19)

Por lo vivido en mis 30 años de vida Sacerdotal y como miembro activo del ministerio de sanación, y con la experiencia que Dios me ha regalado a través de las predicaciones que he podido realizar a nivel internacional, puedo asegurar que creo firmemente en la sanación física, sanación anímica, en la sanación intergeneracional, en la sanación de recuerdos y en la salvación espiritual pues todas ellas se interrelacionan de modo especial en quienes viven en su totalidad de dimensiones, como personas activas en la oración y personas creyentes convencidas del poder absoluto de Jesucristo.


El mismo Jesús no ha descansado un minuto en su labor y ministerio de curación, su sanación es la misma de ayer y la de hoy.

La sociedad actual está pagando las consecuencias por el desgaste ambiental, no desconocemos que la ciencia y la medicina han avanzado pero cada vez hay más enfermos a raíz del cambio climático, el deterioro de la naturaleza que están causando estragos a los seres humanos. Los excesos en el alcohol, drogas, los alimentos manipulados en laboratorio con hormonas y químicos. Provocan diversos tipos de dolencias y epidemias; la pobreza y el hambre, la falta de higiene y la explotación, la violencia y la guerra, originan varias situaciones de enfermedad y trae al mundo moderno nuevas plagas apocalípticas.


De nuevo reconozco que hay avances en la tecnología y en la medicina especializada para la curación de enfermedades. Antes la mortandad de los enfermos contagiados con el virus de sida era alarmante en estos últimos años ha disminuido pero no es suficiente, ni ha sido la solución a los problemas de la salud.  

Thursday, January 28, 2016

Ayer Jesús Hizo Milagros, Hoy También

Por José Eugenio Hoyos



Ayer Jesús hizo milagros!!! Derribo los muros de Jericó... Abrió los ojos de varios ciegos y los de Bartimeo... Levanto a su amigo Lázaro de los muertos!!! Resucito a la hija de Jairo... limpio y libero a los leprosos.. al mudo le hizo hablar y al sordo oír... y al cojo le hizo caminar!!! Ayer Sano, Ayer Libero Ayer hizo Milagros, echo Demonios, Ayer Perdono a la Mujer Adúltera... y Libero a los Pecadores!!! Ayer Perdono al Ladrón Arrepentido en la Cruz!!! Y estos maravillosos acontecimientos y acciones divinas de Jesús de verdad nos entusiasman y nos reafirman más la fe... Hoy ese poderoso Jesús no ha cambiado su amor y su compasión por la humanidad. Ayer vimos Milagros, Sanaciones y Prodigios y Dios nos ama tanto que hoy sigue sanando el cáncer, Hoy está liberando a millones de personas con depresión a millones de personas con ansiedad hoy está levantando con su poder divino a personas paraliticas hoy levanta el Señor a personas moribundas, Hoy Cristo Jesús levanta y para al que está en silla de ruedas o al que esta postrada en una cama. Hoy el Señor sana al enfermo de la próstata, del colon, hoy sana a la mujer con problemas de tumores cancerosos en los ovarios hoy Jesús sana migrañas, tiroides, diabetes y presión alta. Hoy como ayer vemos millones de personas convertidas y a los pies de Cristo a través de su palabra y su evangelio.


Hoy seguiremos viendo más y más milagros y sanaciones porque Cristo no ha terminado con su obra.

En cada Misa de Sanación, en cada Adoración Eucarística, en cada Rosario, dentro de los Grupos de Oración cuando el pueblo con fe ora y alaba allí se manifiesta Dios grandemente y poderosamente “Y yo os digo: Pedid, y se os dará; buscad, y hallareis; llamad, y se os abrirá porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; ya al que llama, se abrirá.” (Lucas 11, 9-10)

Wednesday, January 27, 2016

La Fuente de la Juventud está en Cristo


 Por José Eugenio Hoyos
      

Buscando el camino más fácil la vía más corta y el camino del menor esfuerzo.” Algunos y algunas han dedicado su vida a buscar la “Fuente de la Juventud.” No les importa a algunas mujeres pagar altos precios para encontrar cremas costosísimas para estirar la piel y rejuvenecer las células con crema de aguacate, batido de pepinos, baba de caracol, crema de tortuga, el aloe vera, crema ponds, sábila, crema de almendres, botox y menjurjes de moda ect...

Recuerdo cuando fuimos a comienzos de este año a la peregrinación de Tierra Santa y a visitar el mar muerto. Todos se obscurecieron al untarse del lodo y el barro del mar ya que el guía nos había dicho que ese barro del mar muerto tenía un ingrediente sanador y embellecedor, una de las señoras un poco redondita yo diría mas bien, “Súper Redondita” no se le veían los ojos, mientras que la mayoría se había puesto barro en la cara, ella se había untado y revolcado en el barro y yo le pregunto señora no era solo en la cara y ella me contesto: “Pues como me dijeron que era curativo y milagroso me he untado en todo el cuerpo a ver si de una me adelgazo!!!!” Hoy día son millones de personas que continúan buscando alguna fuente mágica que los traiga éxito. La satisfacción y la felicidad.


Pero la mayor parte de su búsqueda es en vano...

UNICAMENTE!!!! SOLAMENTE!!!! El evangelio de JESUCRISTO!!!! Puede brindar una vida feliz, traer prosperidad, unidad, paz, liberación y sanación. Solo eso lo da Jesucristo Nuestro Señor, porque él está vivo, y nos da vida en Abundancia Gloria a Dios Amen!!!

¿Quién nos da vida? CRISTO!!!! ¿Quién nos da salud? CRISTO!!!!

 

 

Friday, January 22, 2016

Hay que Creerle 100% y Tener Fe en Cristo y Milagros y Sanaciones Lloverán!!!


Por José Eugenio Hoyos


A través de tantos años que llevo en el ministerio de sanación gran regalo que me ha dado Dios he probado y comprobado una y otra vez que asiste a una Misa de Sanación o a una Adoración Eucarística debe creer que es el mismo Cristo que si la va a sanar.

En el convencimiento del Poder de Dios es donde está la sanación.


En el ministerio de sanación, si bien la fe del que ora es importante, en última estancia, la fe que sana, libera y fortalece es la fe en la Misericordia de Dios.

Por ejemplo cuando oro por los enfermos de cáncer o por otro tipo de enfermedades yo no creo solo en mi fe, sino en Dios y en su poder sanador. Creo en la fidelidad de mi Dios que ha prometido escuchar la oración humilde, sencilla, confiada y perseverante. ¡Dios es fiel y cumple sus promesas! Creo en el poder de mi Dios para quien todo es posible. Dios todo lo puede.


Pudo sanar los paralíticos y a los leprosos; pudo devolver la vista a los ciegos y la audición a los sordos: pudo resucitar a los muertos y ¿No va a poder sanar a este enfermo por quien yo estoy orando? ¡Dios todo lo puede! Pensar lo contrario sería delimitar su poder infinito.

Thursday, January 21, 2016

Predicando la Misericordia de Dios en la Renovación Carismática


Por Kelvin Saravia






Bien la ha dicho el Padre José Eugenio Hoyos asesor de la Renovación Carismática de Arlington Virginia cuando estaba predicando en el evento anual de “Lluvias de Bendiciones” organizado por el Minuto de Dios: “Una misericordia sin perdón ni reconciliación no funciona. Si no le agregamos el ingrediente del Espíritu Santo nuestra fe y oraciones no funcionan.”






Y el Padre José E Hoyos tiene toda la razón pues pedimos sanación de enfermedades y liberación de todo tipo de cáncer y no se nos da porque existen muchos cristianos que han intoxicado al Espíritu Santo por el pecado, la falta de perdón y la ausencia de solidaridad y de obras de Misericordia añadió el Padre Hoyos.

Vivir con resentimientos, rencores, venganzas y odios es lo que atrae enfermedades en nuestras vidas. Todo esto es un gran veneno toxico para el espíritu y para el alma.




La vida hay que vivirla como Cristo nos pide que la vivamos: una vida abundante en obras buenas. Somos cuerpo, mente y espíritu, y tenemos que tomar conciencia de que el cuerpo siempre es dominado por la mente. Cuando pensamos mal de una persona estamos afectando nuestro cuerpo con pensamientos nocivos y dañinos. De ahí surgen los tumores cancerosos. Por eso es necesario orar con frecuencia escuchar alabanzas Carismáticas que nos traigan mensajes sublímalas que le inyecten sentimientos agradables al alma al cuerpo y al espíritu.

El odio, el resentimiento y el rencor son como sombras que no permiten que recibas sanación divina.